sábado, 29 de enero de 2011

En el preestreno de "Valor de ley"



El pasado miércoles, en el preestreno de Valor de ley (la adaptación que los hermanos Coen hacen del entrañable western de Hathaway), no pude evitar el llanto, pues el veterano alguacil protagonista me recuerda a un hombre incomprendido que quise mucho. Un tipo borracho y malhablado, criado en un entorno brutal, que frente a mí se volvía manso, vulnerable y tierno: como la flor del tojo. ¡Cuántas enseñanzas le debo!

No hay comentarios:

Publicar un comentario