Non saíu nunca do seu pobo. Non tivo o soño de "coñecer mundo". Pois el era dono dun mundo (e de que mundo!).
No salió nunca de su pueblo. No tuvo el sueño de "conocer mundo". Pues él era dueño de un mundo (¡y de qué mundo!).
No salió nunca de su pueblo. No tuvo el sueño de "conocer mundo". Pues él era dueño de un mundo (¡y de qué mundo!).
Francisco Rabal, en El disputado voto del señor Cayo, unha película de Antonio Giménez Rico.
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