Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo

Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo.
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martes, 31 de diciembre de 2019

LENIN, SEGÚN SHKLOVSKI

Cuenta Shklovski (intelectual a quien cité en mi tesis doctoral) que Lenin “llegó cuando la revolución [rusa] ya era un hecho y se apalancó". Arrancó “en calidad de invitado”, pero “persuasivo, preciso y pertinaz” como era, estaba llamado a desempeñar “un papel relevante”.

domingo, 29 de diciembre de 2019

PERSUASIÓN

No perderé el tiempo tratando de persuadirte, porque si entiendes mis ideas, no las aprobarás. Y si las apruebas, es que no las has entendido. 

(A la manera de Quelonio, maestro de Retórica.)

MAESTROS

Honor a aquellos de los que recibimos enseñanzas, sean de tipo intelectual, laboral, ético, amoroso, erótico... Sin la generosidad de esos seres especiales, la sociedad sería definitivamente un infierno.

sábado, 28 de diciembre de 2019

RONDA DAS FONTIÑAS


PRANTO CONTIDO: esta tarde pasei polo barrio de Lugo no cal vivín uns dous anos.

LLANTO CONTENIDO: esta tarde pasé por el barrio de Lugo [Galicia] en el cual viví unos dos años.

VOCES ROTAS

Según Hemingway, «Todos estamos rotos, así es cómo entra la luz». ¿Será por eso que, en el canto, a uno le atraen tanto las voces desgarradas?

viernes, 27 de diciembre de 2019

PATXI ANDIÓN, EL GUERRERO SOFISTICADO

Patxi Andión.


SALVO en contados casos, el morbo y el intento de uniformización de su larga y varia trayectoria musical son los juncos con que se han tejido las notas necrológicas sobre Patxi Andión. La prensa ha gastado mucha más tinta en recordar su efímero y accidentado matrimonio con Amparo Muñoz (Miss Universo 1974) que en poner de relieve sus cualidades como profesor universitario, investigador o intérprete cinematográfico y televisivo.
En una entrevista concedida a la revista musical Efe Eme (28/01/2009), el artista vasco-madrileño establecía una discutible pero sugerente diferenciación entre el ‘actor’ y el ‘intérprete’, afirmando que el primero "debe tener el deseo, el ánimo, el gusto de transformarse continuamente en otro". Patxi Andión se sentía "intérprete", al considerar que ante las cámaras no dejaba de ser "él mismo", incluso aunque sus papeles estuviesen alejados de sus actividades habituales. ¿Cómo se explica esta paradoja? Cuando Andión se acercaba profesionalmente al séptimo arte, rescataba a aquel muchacho que veía películas con verdadera devoción, aquel pequeño Patxi que —como él mismo contaría— asistía a las salas de cine madrileñas igual que otros acudían a la iglesia. En el intérprete confluían esa cinefilia con una curiosidad voraz por todo lo que le rodeaba, la misma que —convertido ya en cantante de éxito— le llevó a licenciarse en Periodismo y a doctorarse en Sociología. En los rodajes, el guipuzcoano era una especie de espectador activo. Ese gran respeto, ese no querer ensuciar una casa que consideraba ajena, le obligaba a estudiar profundamente las acciones de sus personajes y, sobre todo, le impedía caer en la grandilocuencia. Da igual que abordase un papel de detective (Asesinato en el Comité Central) o de empleado de una gasolinera (La otra alcoba); aunque adoptase comportamientos ajenos, desprendía —auténtico— tanta sobriedad como en la vida real. Si la voz y la mirada son signos distintivos de una persona, podemos decir que, profesionalmente, Andión no practicaba el engolamiento ni exageraba el gesto. En cierto modo, no dejaba de ser ‘él mismo’ en aquellas producciones cinematográficas y audiovisuales.
Aunque para mí actuación e ‘interpretación’ sean sinónimos, siempre defenderé el modelo estilístico de Andión (la contención) como el único verdaderamente efectivo para el cine y la televisión. Tengamos en cuenta que, en estos ámbitos, el abundante uso de los primeros planos magnifica cualquier matiz, por mínimo que sea; la desmesura difícilmente pasa la prueba del algodón. Era el vasco un actor al que no se le notaba que actuase; su naturalidad hacía honor a aquel memorable aforismo del cineasta Bresson: "Producción de la emoción, obtenida por un resistirse a ella". De la contribución de Andión a las pantallas, quisiera destacar su protagónico papel de periodista en ‘Página de sucesos’ (1985). Pueden ver esta interesante serie, que dirigió el cineasta Giménez Rico, a través de la web de RTVE.
Unos apuntes finales, a vuelapluma, sobre el famoso Andión cantautor. Resulta injusto que la mayor parte de mass media repare únicamente en su etapa inicial, la de las canciones protesta, que arranca con Retratos (1969). Son años productivos en los que nuestro protagonista —convencido antifranquista— canta fuerte y muy ronco, "como un guerrero", a decir de un crítico portugués. Pero en los albores de los 80, Andión lleva cabo —sin renunciar a su esencia— un giro expresivo que, guste más o menos, no merece ser pasado por alto. Es la época de Amor primero (1983), probablemente su disco más exitoso, donde colabora Mocedades. El cantautor abre su paleta temática a la intimidad sin dejar de cultivar la denuncia social, siempre escorado a la izquierda. Además, comienza a versionar en castellano éxitos de Lucio Dalla —MaríaTransbordo en SolOh, qué será…— y, bajo el influjo de este maestro italiano, refina su voz de barítono. El guipuzcoano sigue sonando desgarrado, pero adquiere una sorprendente riqueza de matices. Incluso se atreve con tonos bastante agudos, y acaso es ahí donde su arenoso timbre resulta más atractivo: por ejemplo, en el estribillo de María parece un cantante de soul: "Y soñé la libertad / y salir de aquí algún día, día, día". En esa secuencia suelta esquirlas de pasión… 
Me siento orgulloso de haber compartido espacio en una antología literaria, ‘Amores infieles’ (2014), con el Dr. Andión. Intelectual y obrero, tierno y áspero, soñador y rebelde, yo lo definiría como "el guerrero sofisticado".

jueves, 26 de diciembre de 2019

MAXÍN


Imaxineite bailando —esveltísima— este rock de Gene Chandler. Sensual epifanía, anulación do tempo, río de misterio, gozo que, finalmente, non acaricia...
(20 de novembro de 2014.)

miércoles, 25 de diciembre de 2019

HOMBRE SELECTO

Frente al alienado hombre-masa, Ortega y Gasset hablaba del hombre selecto, que no es "el petulante que se cree superior, sino el que se exige más que los demás". En mis clases de Contexto Internacional y Comunicación, estudiamos al gran filósofo español.

GARNET MIMMS

«Su suplicante intensidad, derivada del evangelio, convirtió a Garnet Mimms en uno de los primeros cantantes de soul verdaderos, y su legado sigue siendo subestimado» (Steve Huey).

domingo, 22 de diciembre de 2019

HUIDA HACIA DELANTE

"Un profesor de la carrera nos metió en la cabeza la huida hacia delante, que un gesto no te sepa a resabio, mantener la frescura, probar cosas nuevas; y si fallas, fallaste. A veces, te estampas y pasas temporadas en que no sale nada o que no estás a gusto con lo que estás haciendo y tienes que buscar el quiebro hacia algo con lo que estés contento". Leído hoy en la prensa; no recuerdo el nombre del entrevistado.

sábado, 21 de diciembre de 2019

SOCIEDAD

El espectáculo barato frente a la profundidad y a la interpretación. El insulto y la vocinglería en vez de la cultura del esfuerzo. «O curas hominum! O quantum est in rebus inane!» (¡Oh, afanes de los hombres! ¡Oh, cuán vacías son todas las cosas!), decía aquella sátira de Persio.

miércoles, 18 de diciembre de 2019

ANNA KARINA: DULCE REBELDÍA

LA RECIENTE muerte de la actriz Anna Karina —emblema del celuloide francés— me sorprendió durante el viaje de Bolivia a España. Su pérdida, a los 79 años, se produjo sólo once días después del 89 aniversario de su expareja y descubridor artístico, el magistral director Jean-Luc Godard. Si la memoria no me falla, él es hoy el único superviviente de la Nouvelle Vague, movimiento experimental que, en las postrimerías de los 50, constituyó el pórtico de entrada al cine moderno, teniendo como claros precursores a Bresson y a Bergman. Por supuesto, Karina —mucho más que una musa— fue decisiva en ese punto de inflexión expresivo; la actriz franco-danesa, junto a otras colegas como Jean Seberg, Jeanne Moreau o Bernadette Lafont, inventó un modo de actuar que rompía definitivamente con el engolamiento, y a través del cual los detalles íntimos se cargaban de lirismo. En esa manera de actuar, la espontaneidad —visible en algunos diálogos improvisados— casaba perfectamente con la frase precisa —los guiones de la Nouvelle Vague contenían abundantes intertextualizaciones— y el descaro se reconciliaba con la elegancia. Me parece muy representativo el rupturista baile de ‘Banda aparte’ (Godard, 1964), en donde el trío protagonista bailaba el ‘Madison’ y hacía chasquidos con gran sentido del ritmo, incluso cuando la música se cortaba y una voz en off describía los pensamientos de esos personajes. Ahí estaba el magnetismo de Karina iluminándolo todo… Y cómo olvidar aquella escena de otro filme godardiano, ‘Alphaville’ (1965), en donde la chica encarnada por la franco-danesa, con un cigarrillo en la mano, le preguntaba al maduro agente secreto interpretado por Eddie Constantine: “¿Tiene fuego?”. Y él le respondía: “He viajado 9.000 kilómetros para dárselo”. El doble sentido de ese diálogo elevaba la temperatura sin necesidad de derramar una gota de sudor. 
Anna Karina, en El soldadito, largometraje de Jean-Luc Godard.

Durante el rodaje de ‘Alma desnuda’, la webserie sociojuvenil que dirijo junto a Sergio Céspedes y que produce Univalle (el boliviano centro de superiores en el cual trabajo), hemos tenido muy presentes a Anna Karina y a Jean Seberg, sobre todo para otorgarle matices a nuestro personaje ‘Mila’. Esta chica sensible, rebelde y carismática —a la que da vida Alexandra Rocha— no oculta su lesbianismo en medio de un entorno radicalmente machista y homofóbico. Pues bien, al poner sobre la mesa los mencionados referentes interpretativos, Céspedes y yo no sólo buscábamos el punto de equilibrio entre el temperamento y la sobriedad, entre la sofisticación y la frescura; también queríamos aprovechar la fisicidad para proyectar las ideas y los sentimientos, y, en ese sentido, la Nouvelle Vague (que entronca con el cine mudo) es una fuente de posibilidades. Algunos planos de Alexandra Rocha fumando al aire libre conectan claramente con la lírica presentación de Karina en el largometraje godardiano ‘El soldadito’ (1960). Recuerdo cuando le envié, vía WhatsApp, un fotograma de esa secuencia a la intérprete boliviana, y le encantó la referencia: “¿¡Cuándo hacemos algo así con Mila!?”.
Alexandra Rocha, en nuestra webserie Alma desnuda, que se encuentra en fase de postproducción. Foto: Univalle Films.



Entre 1961 y 1967, Karina vivió con Godard una historia de amor apasionada pero tormentosa, y, paralelamente, protagonizó siete de los filmes del ‘enfant terrible’ de la Nouvelle Vague. «Era capaz de decir que se iba a por tabaco y no aparecía en tres semanas», confesó la intérprete en una entrevista. No obstante, aunque criticase el comportamiento errático de su exmarido, la actriz hacía un balance positivo de aquel matrimonio: «Fue una historia muy bonita, pero era agotadora para una chica tan joven». 


Después de muchos años sin hablarse, Godard y Karina volvieron a coincidir en un programa televisivo francés, ‘Lunettes noires pour nuits blanches’ (‘Gafas oscuras para noches blancas’), en 1987. Ninguno de los dos sabía que iba a ver al otro. El presentador, Thierry Ardisson, les preguntó: “¿Se puede volver a amar después de un amor tan intenso?”. La actriz respondió: “De manera diferente”; y el cineasta: “Mucho más”. Rota por la emoción, Karina abandonó repentinamente el plató, tras haber confesado: “Me voy a llorar a casa”. Ni siquiera el gesto de la mano de su exmarido consiguió reconfortarla… Ese doloroso momento televisivo concentra dos de las señas de identidad de Karina como mujer: la intensidad y la ausencia de rencor. Acaso su belleza física (ojos galácticos, piel de nácar, piernas infinitas…) era un reflejo de su alma pura. 

martes, 17 de diciembre de 2019

LUNETTES NOIRES...

‘Lunettes noires pour nuits blanches’ (‘Gafas oscuras para noches blancas’). Hermoso título de un antiguo programa televisivo francés.

EL ABRAZO


—Si vas a romper a llorar cuando nos veamos, no sé si tendré valor...
—Cerraremos los ojos cuando nos abracemos.

martes, 10 de diciembre de 2019

POR VIVIR

He vivido no pocas experiencias, y creo que algunas de ellas (como la emigración a Ultramar) me han otorgado profundidad; pero me consuela saber que es más (bastante más) lo que me falta por vivir.

domingo, 1 de diciembre de 2019

SOÑANDO CANCIONES

Me he despertado soñando el estribillo de una canción (inexistente hasta la fecha) que dice: "Noches de pie en la catedral. / (Uh, uh!) / Morderé la manzana de la novedad". No es la primera vez que compongo en sueños una secuencia con letra y melodía, pero últimamente no me sucedía. Lo primero que he hecho, al despertar, es grabarme cantando ese estribillo. Para que la marea no borre las huellas.

jueves, 28 de noviembre de 2019

SEXUALIDAD

"Si se separan los conceptos de sexualidad y fertilidad, entonces la sexualidad pasa a ser cualquier cosa". ¿Cualquier cosa? ¡Hombre, Santidad, si me permite el arrojo, digo yo que todo dependerá de la intensidad (y de las mañas) de los correspondientes amantes!

sábado, 23 de noviembre de 2019

CONTRA LAS INJUSTICIAS

Llámenme idealista o testarudo, pero yo siempre me voy a posicionar contra las injusticias, sean éstas de índole social, sexual o racial. Como sentenció Lenin, "Si no eres parte de la solución, eres parte del problema". Y yo quiero contribuir a construir un mundo más igualitario.

viernes, 22 de noviembre de 2019

EVO MORALES: ANATOMÍA DE UNA CAÍDA


DETERMINADOS MEDIOS de comunicación internacionales minimizan —o hasta ponen en duda— que en los últimos comicios generales de Bolivia, celebrados el 20 de octubre, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) cometió fraude, lo que constituye un grave atentado contra la democracia. No se puede tapar el sol con un dedo: en un informe preliminar, resultado de una auditoría, la Organización de Estados Americanos (OEA) puso de manifiesto la “magnitud” de la manipulación informática y la existencia de actas falsificadas. Este documento se hizo público horas antes de que el expresidente del país sudamericano, Evo Morales, renunciase a su cargo, abandonado por el Ejército —que le sugirió dejar el poder—, la Policía —que se había amotinado el día anterior— y amplios sectores urbanos —el llamado ‘movimiento cívico’— que protestaron en las calles durante tres semanas y fueron decisivos en la caída de Morales. Estos últimos disidentes se organizaron en torno a los ‘comités cívicos’, organizaciones vecinales y gremiales que terminaron desplazando a los partidos políticos en las protestas contra el exjefe de Estado.

No hay pruebas que nos permitan afirmar que el TSE cometió fraude a petición de Morales, aunque sería de ingenuos no sospechar al respecto, pues en la última legislatura el dirigente indígena institucionalizó todos los poderes del Estado, con el fin de perpetuarse en el sillón a cualquier precio, como explicaré más adelante. Aunque en un principio aseguró que sería respetuoso con las conclusiones del informe de la OEA, el propio Morales confesó recientemente que intentó frenar su publicación. Una vez que vio la luz, el 10 de noviembre, el político socialista manifestó —demagógico— que ese documento fue más “político” que técnico-jurídico; y aún sigue sin aceptar el fraude. Para crear una cortina de humo, adoptó una retórica netamente victimista: según él, las Fuerzas Armadas, en connivencia con la Policía, Carlos Mesa (principal líder de la oposición y exjefe de Estado) y Fernando Camacho (presidente del Comité Cívico pro Santa Cruz), perpetraron un “golpe de Estado”. Recientemente Morales afirmó también que la publicación del informe de la OEA “alimentó” ese presunto golpe, que dan por hecho muchos medios internacionales.

A mi entender, sería inexacto hablar de un ‘golpe de Estado’, si nos atenemos al significado —“usurpación violenta del gobierno de un país”— que le otorga la RAE, en el ‘Diccionario panhispánico de dudas’ (2005), a esta expresión, un calco de la francesa ‘coup d’État’. En otras palabras: para que las Fuerzas Armadas cometiesen golpe de Estado, tendrían que haber seguido la lógica estratégica de tomar el poder. Aquí el Ejército se limitó a intervenir de forma verbal (el entonces jefe de la institución militar, Williams Kaliman, instó a Evo Morales a abandonar el poder), supuestamente para tratar de resolver la crisis política en la que se hallaba sumido el país desde el 21 de octubre, cuando comenzaron las masivas movilizaciones urbanas ante las sospechas de fraude, bastante evidentes. Recordemos: el TSE suspendió la transmisión de resultados preliminares electorales durante 23 horas, y al retomar la actividad mostró un cambio de tendencia muy favorable para Morales: los resultados ya no le exigían ir a una segunda vuelta, al superar los diez puntos de diferencia con respecto a Mesa, siendo, por ende, ‘el presidente electo de Bolivia’. Tras haber presenciado este episodio grotesco, gran parte de la población comenzó a reclamar una segunda vuelta, opción que Manuel González (jefe de la misión de la OEA) defendió pero que Morales rechazó, aferrado a los resultados. Y es precisamente esa negativa del exmandatario la que colocó a Bolivia en una situación crítica. 

A partir de ahí, se dispara la polarización; los enfrentamientos violentos entre los oficialistas —seguidores del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Morales— y los disidentes urbanos —que bloquean las calles como medida de protesta— son prácticamente diarios. Ese clima de tensión propicia que, entre los seguidores más radicales de ambos bandos, aflore el racismo, una epidemia que sigue siendo estructural en el país; la quema de banderas indígenas (la wiphala) y regionales (la de Santa Cruz) abre viejas heridas, y refleja, además de la intolerancia, la carencia de argumentos para defender una postura.

Fue el 10 de noviembre, al conocer el informe de la OEA, cuando las Fuerzas Armadas decidieron ponerse del lado de la población sublevada. En consecuencia, Morales dimitió, al igual que el vicepresidente, Álvaro García Linera, y varios ministros de su Gobierno. Cabe señalar que muchos integrantes del MAS fueron presionados a renunciar de sus funciones por grupos fundamentalistas que secuestraron a sus familias o les quemaron sus casas; medidas coactivas de ese tipo las sufrieron posteriormente políticos del bando contrario, como Arturo Murillo o Nelson Condori. Dos días después de la renuncia de Morales, la Asamblea Legislativa Plurinacional eligió por sucesión constitucional a una presidenta interina, la ultracatólica Jeanine Áñez, con el fin de “pacificar” el país y encaminar unas nuevas elecciones.

Anteayer, en la Asamblea Legislativa, se allanó el camino para ir a las urnas, pues el MAS presentó un proyecto de ley en donde reconoce la presidencia de Áñez. En ese mismo documento, la formación socialista asume que Morales y Linera se asilaron y abandonaron sus funciones. Puede parecer un primer paso en la pacificación nacional, pero, por el momento, es sólo maquillaje; Bolivia sigue convulsionada, partida en dos, tal y como la dejó Evo Morales. La población sufre desabastecimiento, pues los camiones que transportan alimentos y combustible no pueden pasar por más de un centenar de puntos en las carreteras del país; seguidores ‘evistas’ llevan a cabo esos bloqueos para reclamar la vuelta del dirigente asilado, sin acatar la postura oficial del MAS. Por lo demás, aunque el Gobierno continúe negociando con el partido izquierdista el fin de la violencia, la sangre no ha dejado de derramarse en la última semana; hace sólo tres días, en El Alto (La Paz), manifestantes afines a Morales atentaron, mediante el empleo de dinamita, contra una planta distribuidora de combustible, ocasionando ocho pérdidas humanas. Un mes y un día después del inicio de la crisis, la cifra de muertos supera los 30 y se cuentan por más de 700 los heridos.

Evo Morales llegó a ser un titán de la política latinoamericana contemporánea, muy respetado en España por los mismos socialdemócratas que reniegan de algunos de los principales aliados de nuestro protagonista (Chávez, Maduro, Fidel y Raúl Castro…). Durante sus casi catorce años de mandato, Morales consiguió las mayores transformaciones sociales, económicas y culturales en la Historia reciente de su país —con él, se redujo la pobreza extrema a más de la mitad, bajó la cifra de desempleo casi en la misma proporción, el PIB creció anualmente a un ritmo medio del 4,9%, la esperanza de vida subió de los 64 a los 71 años, se reconocieron como oficiales 34 lenguas indígenas…—, pero, paradójicamente, terminó convertido en uno de esos especímenes autoritarios a los que tanto decía detestar, si bien sus críticas sólo se dirigían a los de derechas. “El dominador está dominado por su dominación”, sentenció Marx.

Indudablemente, en su última época, el primer presidente indígena de Bolivia intentó amoldar el sistema a sus intereses personales, cooptando los poderes legislativo y judicial. La crisis política nacional (y la caída del propio Morales) nació en el momento en que el político socialista no aceptó los resultados del referéndum del 21 de febrero de 2016, cuando un 51,30% de bolivianos rechazó modificar la Constitución para que el propio dirigente se postulase por cuarta vez consecutiva a unas elecciones. Sin embargo, el Tribunal Constitucional lo favoreció en 2017, y, so pretexto de ‘derechos humanos’, habilitó su nueva candidatura, al igual que haría el Tribunal Supremo Electoral un año después. En consecuencia, el malestar creció en el país; el lema ‘Bolivia dijo no’ —que se viralizó a través de ‘hashtags’— reflejaba cómo Morales había adquirido un cariz autoritario; se sentía por encima del pueblo soberano y de las leyes. A esas alturas ya era un candidato deslegitimado. El reciente fraude electoral (y la negativa del expresidente de ir a una segunda vuelta) hizo derramar el vaso; muchos bolivianos dejaron de creer completamente en el Estado regido por el masista. Y es en esta coyuntura donde surge un nuevo actor sociopolítico, el ‘movimiento cívico’, que encabezan el carismático potosino Marco Pumari y el cruceño Fernando Camacho, un ultraconservador y panfletario religioso.

Ebrio de poder, Morales no supo retirarse a tiempo. Y en su prolongada caída, arrastró al país. La diferencia es que él encontró asilo político en México —donde lo recibieron con honores—, mientras que Bolivia se halla en el caos.

(Publicado hoy en El Progreso de Lugo, 22/11/2019.)

martes, 12 de noviembre de 2019

BOLIVIA SE RESPETA (II)

La #democracia está por encima de las ideologías, precisamente porque, gracias a dicho sistema político, podemos expresar libremente nuestros pensamientos, nuestras convicciones, y votar a un partido u otro. Honor a los griegos por habernos legado tan maravilloso invento: 'δημοκρατία' ['dēmokratía'].

BOLIVIA SE RESPETA

Determinados medios de comunicación internacionales parecen olvidar que en #Bolivia el expresidente, #EvoMorales, cometió fraude electoral; así lo probó la #OEA. Este atentado contra la democracia no puede pasarse por alto.

domingo, 10 de noviembre de 2019

BOLIVIA, HOY

Es menester seguir denunciando el uso de la violencia por parte de determinados seguidores de ambos bandos en #Bolivia. Flaco favor le estáis haciendo a la democracia, atentando contra los derechos humanos, destruyendo propiedades ajenas... Nada os da derecho a cometer estas injusticias. Estáis expandiendo el veneno del odio, de la intolerancia, del terror, y esos son síntomas de fascismo. Si no sabéis pensar por vosotros mismos (pues estáis completamente alienados), quedaos en casita. Una democracia se construye con seres civilizados, y en ese camino el respeto es la base. No necesitamos hombres de las cavernas.

COMO UN VIRUS: ELECCIONES ESPAÑOLAS (II)

El auge de un partido neofascista como VOX produce vergüenza ajena. ¡Una formación racista, xenófoba, machista y homófoba ha obtenido más de 50 escaños en el Parlamento Español! Ya lo explicó Ortega y Gasset hace casi un siglo: las masas carecen de conciencia histórica, de sensibilidad social (sólo piensan en su propio bienestar) y de criterio propio, y son altamente sugestionables. Sólo así se explica que se expanda un virus en un país que padeció una guerra civil brutal y casi 40 años de dictadura fascista. "¡Qué tiempo de incultura y de mal gusto!", hubiera exclamado el gran poeta latino Catulo.

ELECCIONES ESPAÑOLAS (I)

Notas que sobras en tu propio país cuando eres emigrante y no te envían la papeleta que te permite votar por correo... 

ADIÓS, EVO MORALES

HASTA AQUÍ hemos llegado. Ya no se puede confiar de ningún modo en un gobierno que pervierte hasta un punto nauseabundo el sistema democrático, que comete fraude electoral (la OEA lo ha confirmado con su auditoría), que institucionaliza los poderes y los órganos. El Sr. Morales acaba de renunciar a su cargo. Después del fraude, sería impropio, inadmisible, que su partido, el MAS, pudiese presentarse a unas nuevas elecciones; según la Ley Electoral, está prohibido que la formación que corrompe de ese modo el juego democrático se quede sin sigla política.

miércoles, 30 de octubre de 2019

EMIGRANTE

Después de una hora y media en moto, con decenas de calles cortadas y un sol contundente, llegamos a Colcapirhua. Un capítulo más en la aventura del emigrante...

sábado, 26 de octubre de 2019

EXHUMACIÓN DE FRANCO

Era inmoral que el sanguinario dictador compartiese espacio con tantos seres a los que privó de su libertad, de su vida. Ellos, los caídos, son el símbolo de la decencia, de 'lo que pudo haber sido' y de 'lo que será'.

lunes, 30 de septiembre de 2019

TU APOYO, NO TU DESCARGA



—... Yo no te voy a dejar solo, pero vos me tenés que tratar de otra forma.
—Ya, lo que pasa es que yo estoy solo: eso es lo que no entiendes. Tú todos los días te vuelves a tu casa, con tu madre, con tu padre, con tus hermanos. ¡Y yo no sólo recibo respuesta, sino que ni siquiera puedo escribirles, coñes!
—Yo no tengo la culpa de eso. No tengo la culpa. No tengo la culpa de no ser española, de no ser exiliada, de no estar en una guerra…
—¿Qué dices? ¿Yo te dije eso?
—No, pero parece que ya me condenaste… Andrés, mirá, mirame; yo te quiero mucho, te quiero mucho, y estoy dispuesta a ser tu compañera, tu apoyo, tu motor, tu amor. Pero no estoy dispuesta a ser tu descarga, no, no.

(Vientos de agua, Juan José Campanella)

domingo, 29 de septiembre de 2019

'AVANTI' SIEMPRE

—¿Qué pasa? ¿Que tú no lloras nunca?
—No. ¿Cuándo me viste llorar? Cuando me abandonó mi familia en el barco, ¿me viste llorar? ¿Lloré en el conventillo cuando no teníamos comida? Cuando se murió tu familia, no lloré; ni con la tuya, ni con la mía... Si cada vez que te dije, hubiese llorado, estaría más seca que este maní. Yo no lloro nunca; yo sigo avanti. Avanti antes y avanti siempre.

(Vientos de agua,  J. J. Campanella)



domingo, 22 de septiembre de 2019

DONDE ESTOY

Me trae sin cuidado que no me valores. Ya estoy yo para valorarme. Nadie mejor que yo sabe lo que he luchado para estar donde estoy.

sábado, 31 de agosto de 2019

LA MÚSICA

Escuchado ahora en una cafetería de Cochabamba (Bolivia):

"¿Transportar el piano? Lo que uno transporta es la música, no el instrumento. Es el volumen, la textura, la sonoridad...".

sábado, 24 de agosto de 2019

CANCIÓN PARA LISA

Estes últimos días tiveron para min un sabor agridoce: por unha banda, meus pais viñeron visitarme a Bolivia; e, por outra, os tres enterámonos aquí da morte da querida Elisa González, quen me coidou —xunto ó seu marido, José Mediante— cando era cativo. Ámbolos dous tratáronme sempre coma o fillo que nunca tiveron. Católica convencida, Elisa era o súmmum da xenerosidade e da humildade, valores que hoxe cotizan á baixa. Contaxiados quizabes polo seu carácter tenro, os amigos e familiares chamábamoslle ‘Lisa’, verba que soa coma o asubío do noso admirado merlo, ou coma a brisa movendo as follas dos amieiros…

Pouco importa que entre Elisa de Mediante e mais eu non existiran vínculos de sangue: estamos ante unha das persoas que máis se implicou en todas as etapas da vida de meu. Lembro unha anécdota que data de 1993. Elvira de Robaín —a miña tía avoa emigrada a Bos Aires— viñera pasar o verán ó noso Santiso natal; eu, que tiña 5 anos, encariñárame coa señora; admiraba a súa valentía e fascinábanme as doces verbas (‘pileta’, ‘valija’, ‘pibe’…) que traía de Ultramar. Pois ben, dende a primavera do 94, cada vez que paseabamos polo miradoiro do Bedrín e ollabamos un avión, Elisa —sen separar a vista do ceo— dicíame: “Mira, Hectorín, aí vai a tía Elvira camín da Arxentina!”, e, inmediatamente, os dous sorriamos. Aquela fantasía (que tiña forma de flashback) expresaba oblicuamente unha esperanza: a irmá do meu avó Paco xa había un tempo que regresara ó seu país de adopción, e, como nos botaba en falta, non podía tardar moito en volver visitarnos. Esa maneira de pensar tan candorosa e imaxinativa distinguía a Elisa doutras veciñas. Por certo, a tía Elvira cumpriunos o gusto sete anos despois.
Dona dunha paciencia infinda, Elisa acompañoume nas miñas primeiras andanzas artísticas e comunicativas. Entre os 9 e os 11 anos, influído pola miña nai, simulei a emisión dun programa radiofónico en diferido; eu prepáraballe a Elisa os guións das súas intervencións, e ela lía aquelas liñas cunha voluntade de ferro. Se se trabucaba, sempre estaba disposta a repetir a gravación as veces que fixera falta, só por compracerme: proba inequívoca dun amor sen límites.
Na puberdade, desenvolvín un carácter introspectivo e adentreime na poesía, mais seguín plenamente ligado a José e a Elisa. Xa con 18 anos, xusto despois da morte de Mediante, emigrei a Madrid para estudar Xornalismo. Cando retornaba a Santiso, polo verán ou polo Nadal, Elisa era a primeira en visitarme. Mirábame como se estivera descubrindo un novo planeta, e comíame a bicos. Cando estaba a piques de partir cara a Bolivia, a miña amiga xa se atopaba un chisco delicada, e mandou aviso a meus pais de que prefería evitar a nosa despedida. Fíxenlle caso. Pero, afortunadamente, tivemos ocasión de reencontrarnos no último Nadal, trazando así un amor circular.
Querida Lisa, ti para min es máis que unha amiga insuperable: es “a miña segunda nai”, como che gustaba que subliñase. Alí onde esteas, sei que poderás escoitarme; grazas á túa motivación, perdín o medo escénico e aprendín a cantar ben alto. 

[Publicado en El Progreso de Lugo, 24/08/2019.]

martes, 12 de febrero de 2019

Carta a Míriam Ferradáns


QUERIDA MÍRIAM: O pasado verán, cando ti e mais eu aínda non nos coñeciamos, Tamara Andrés falárame magnificamente, en Pontevedra, de ‘Nomes de fume’. Abofé que a nosa amiga acertou coa recomendación, pois ese poemario teu paréceme conciso, valente e moi potente: vaian por diante os meus parabéns.

Con Dores Tembrás como excelente guía, cheguei ata a casa familiar (o “lugar escuro”) do teu ‘eu’ poético, que me involucrou nun vibrante tributo á memoria; así, imaxinei, por exemplo, como sería “morrer perforado polo pau dunha ervella”. Precisamente nese intre estremecinme e collín da man á cantora. Ela aloumiñoume decontado; lóxico en alguén que alberga moita tenrura e que reivindica o tacto como método para achegarse plenamente á realidade (e mesmo á memoria). Así mesmo, neste espiñoso pero necesario ritual, loitei contra a mediocridade da institución familiar clásica. Porque a “tribo” xeralmente tenta esquecer as perdas para evitar o sofrimento, traizoando tanto agarimo recibido e erixindo —sobre a base do tabú— un ambiente asfixiante. Pero o teu suxeito lírico non cansa de pronunciar un “nome de fume e pedra”; cunha cantora tan leal —e rebelde— na familia, a referida persoa morta sempre estará a salvo.



Míriam, posúes esa gran intuición que é inherente a todo poeta xenuíno (tirando do fío, ‘vate’ comparte etimoloxía con ‘vaticinar’). A dita ollada reflíctese —con alcance telúrico— no tratamento dos paus das ervellas ou neste belísimo micropoema: “As mulleres de negro ofrecen o seu corpo á terra / é o xeito escollido para defenderse do infortunio / entregándose a el definitivamente”. 


En ‘Nomes de fume’, a litúrxica meditación adopta —mediante o diálogo— unha fasquía polifónica; e, nese senso, quixera salientar o teu excelente emprego do ton interrogativo, que me lembra ó de Pizarnik e que destila moita sinceridade: “Temos prohibido o tacto: // Sabes ti a diferenza entre corazón e peito?”. Velaquí un fraseo duro en aparencia, mais lene por dentro, coma algunhas froitas. Hai máis exemplos deste tipo no teu libro; o dominio da dicción permite acadar conquistas tan trascendentes.

Isto é todo por hoxe, Míriam. Querías saber as miñas impresións —que honra!— tras a lectura do teu debut editorial, e decidín enviarche esta carta, seguindo o costume dos nosos referentes inmarcesibles. Agardo que nos vexamos pronto no teu Bon nativo ou en Lugo. Pedireiche que me dediques o fermoso libro… E se nos entra a fame durante a conversa, podemos comer unhas galletiñas ‘Dinosaurus’ (eu tamén devezo por elas, e o binomio poesía/nenez é moi vizoso). Mándoche unha aperta fonda. Héctor. 


P.D.: Se ves á marabillosa Tamara, dálle recordos da miña parte. 


(Publicado en El Progreso de Lugo, Diario de Pontevedra Galiciaé, 12/02/2018.)

lunes, 21 de enero de 2019

'Un santiseiro facendo as Américas', reportaxe

Para ler unha reportaxe publicada hai uns días en El Progreso de Lugo con motivo do meu periplo boliviano, pica aquí. O texto é obra da compañeira Isabel García.

 Servidor, en Tarata (Cochabamba, Bolivia). Fotografía de Julio César Ureña.

jueves, 17 de enero de 2019

A avoa Remedios

COMO A nosa casa atópase en obras, meus pais e eu pasamos as vacacións do Nadal no que fora o fogar santiseiro, durante moitos anos, da miña bisavoa Remedios de Rochiña. Aínda que non tiña estudos, a avoa Remedios —como lle diciamos agarimosamente a maioría de familiares— destacaba pola súa correcta educación, a súa elegancia innata e o seu verbo fluído. Lembro a fantástica réplica que a trabadesa lle dera a un médico do Principado de Andorra, onde viven aínda hoxe dous fillos seus. Na consulta, o doutor, abraiado pola sólida saúde da octoxenaria señora, quixo advertir a esta dos males da senectude: “De todos modos, vaya con cuidado, que tampoco tiene edad para hacer ciertas cosas…”. E a miña bisavoa sentenciou así a conversa: “Doctor, usted también llegará —quiera Dios— a mis años, y se dará cuenta de cómo funciona su cuerpo; no será necesario que ninguno de sus colegas se lo explique”. O médico esbozou un sorriso forzado e non soupo que dicir ante a sagacidade de dona Remedios, quen, asemade, modulaba a voz nos intres de descontento, dor ou euforia, salientando as frases máis significativas e respectando os necesarios silencios —moito terían que aprender dela algúns comunicadores de atropelada dicción e entoación plana!—.
Porque coñecín ben á miña bisavoa, puiden recreala nun belísimo soño. Dona Remedios, convertida nunha tardía pero carismática actriz de teatro, regresaba ó casarío de Robaín, despois de concluír a xira da súa terceira obra. “Vénche cargada coma a abella!”, dicíame —sorrindo— a súa filla Aida. O certo é que a señora Remedios traía varias maletas repletas de vestimentas (na realidade era moi coqueta) e de libros (Rosalía, Lorca, Unamuno, Cunqueiro, Mihura…). Tanto é así, que a miña avoa Aida contou coa axuda da súa curmá Edelmira, a Grande, para subir a equipaxe ó faiado.

Sei que á avoa Remedios teríalle gustado saber deste soño, onde todo concordaba. O seu espírito aventureiro. O seu don de xentes. A súa facultade natural para recoller unha gran suma de refráns, romances, cancións, historias con resonancias mitolóxicas…, e para adaptar algunhas destas obras ás circunstancias das conversas. O seu camisón branco impoluto. O seu intenso suspiro a altas horas da madrugada, anunciando o fin dun soño. O seu preciso sentido da morte e da natureza: “Que un fillo vexa morrer ó seu pai é lei de vida: hai que aceptalo. Pero un pai xamais debería ver morrer ó seu fillo”.

Todo concordaba naquel soño; a profesión de actriz non funcionaba como hipérbole: traía, por fin, xustiza á vida dunha creativa e entrañable muller que non tivo posibilidades de formarse e que sufriu boa parte dos horrores do convulso século pasado, pois naceu en 1911 e morreu en 2003. 

viernes, 11 de enero de 2019

A poesía é semente


GOETHE, YEATS, Kavafis, Pound, Lorca… Conservo varias antoloxías da colección ‘Mitos Poesía’ que Mondadori publicara a finais dos 90 —na miña nenez— e que me regalara, cando eu xa era mocete, un primo algo máis maior ca min, o querido Jose do Castro. “Queda con elas”, dixérame, “que eu xa as teño moi lidas”. Aquelas edicións de peto estaban especialmente dirixidas á xuventude, de aí o baixo prezo (350 pesetas), a distribución en quioscos, os textos escollidos con delicadeza e as presentacións, que lembraban ás dos cedés, non só polas vistosas portadas, senón tamén polo tamaño. Todo iso propiciou que un fato de adolescentes e xoves adultos penetrase na mellor poesía sen medo, lonxe das pompas, ata comprender que a beleza deste xénero é purificadora: por unha banda, nun arrastre sensitivo, troca —amplifica— a percepción do lector, incitándoo a que ache a súa verdadeira identidade (ou a que se reconcilie con ela); e, por outra, ó conxugar (por vía do estético ritmo) referencias culturalistas, coloquialismos e vulgarismos, fomenta a querenza pola diversidade. Pouco lle debeu de importar iso a Iberia, que daquela rexeitou a proposta de Mondadori, consistente en agasallar con libriños de ‘Mitos Poesía’ ós pasaxeiros da Ponte Aérea entre Madrid e Barcelona. A compañía aduciu que esa lectura “podía ser demasiado arriscada e forte” para os seus clientes. O arriscado é ser cidadáns dunha sociedade na que o egoísmo leva décadas medrando mentres moitos poderosos nos ocultan os lenitivos… Dito o cal, ‘Mitos Poesía’ tivo unha recepción sorprendente, chegando a vender un millón de exemplares.

Dende o pasado verán, Penguin Random House distribúe a colección ‘Poesía Portátil’, coa que retoma precisamente o bo labor de ‘Mitos Poesía’. O xigantesco grupo editorial, no cal está integrada a antiga Mondadori, xa leva publicados —cun prezo de 4,90 euros— oito números; a escolma de Pizarnik (‘En esta noche, en este mundo’) paréceme exquisita. Terá ‘Poesía Portátil’, con Safo ou Neruda, unha influencia minimamente considerable entre os raparigos, coma a que tivera a colección pioneira? Nas redes sociais (onde os mociños fedellan tanto) só un público adulto está a saudar o proxecto lírico de Penguin Random House; non me estraña a indiferenza, pois, en termos artísticos —vou alén da literatura, que os referentes neste eido son residuais—, o gusto adolescente dexenerou abondo. Hoxe a maioría —alienada— escoita decote o monocorde e basto reguetón, e segue con fervor ‘Operación Triunfo’, un dos programas que máis ten contribuído a desdeñar a cultura do esforzo e a identidade dos artistas xenuínos. En efecto, a sutileza inherente á poesía atópase nos antípodas deses patróns dominantes tan banais. De todos os xeitos, a lírica é semente antes que froito; pode permanecer —e sempre permanece, til máis, til menos— allea ás modas, pero, finalmente, acabará pousándose nela unha criatura soñadora, a cal endexamais esquecerá o consecuente estouro emocional (o primeiro de tantos). Como sentenciara Octavio Paz, “A poesía consagra o instante”.