Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo

Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo.
-Correo: acebobello@gmail.com
-Instagram: @hectoracebo
-Twitter: @HectorAcebo

sábado, 23 de abril de 2016

Evocando a Manolo Tena

El jueves de la semana pasada, en El Progreso de Lugo, publiqué una columna sobre el malogrado cantautor Manolo Tena. Aquí puede leerse el texto traducido al castellano: 

UN ROCKERO SENSORIAL

La portada de Sangre española (1992),
el segundo álbum de Tena en solitario.
 
Como poeta, les debo mucho a los cantautores que escuché en la infancia. Fueron mi primera escuela en el arte de inyectarles ritmo a las palabras. Con aquellos referentes, comencé a escribir pequeñas canciones a los 10 años. Tenía unas nociones de piano, pero casi siempre utilizaba la voz para componer las melodías. Ya en la adolescencia, las letras de Sabina me condujeron a la lírica de César Vallejo y Neruda; tras esas revelaciones, fueron surgiendo mis primeros balbuceos poemáticos. En el último ámbito me sentí más a gusto. 

Recientemente murió Manolo Tena, uno de los cantautores rockeros de mi niñez. Cuando conocí la noticia, se me vino a la memoria el momento en el que un primo me dejó —allá por el 99— el casete de Sangre española, el mayor éxito del extremeño. Tena era un letrista de métrica ajustadísima y un intérprete especial. Su rasgada voz revelaba —igual que sus oxímoron— a un hombre en desajuste con la realidad.

En el documental Manolo Tena: Un extraño en el paraíso, el protagonista desveló que la bellísima pieza “Quiero beber y en el olvidar” (letra suya con melodía de Pancho Varona) contiene un eco vallejiano. El poeta peruano decía: “Quiero escribir, pero me sale espuma”, y Tena cantaba: “Quiero ser mar; sólo consigo espuma. / Quiero avanzar; sólo consigo espuma”. Este ejemplo demuestra la relación carnal que el rockero tenía con las palabras. Desde luego, era asombrosa la potencia de su expresión sensorial. 


Entre febrero y marzo, disfruté siguiendo las interpretaciones de Tena en “A mi manera”, programa de La Sexta. Cuando acabó la temporada, decidí que esta misma primavera le propondría al músico una entrevista periodística. Quizás hubiéramos dedicado parte de la conversación al binomio poema-canción... 

El fundador de Cucharada y Alarma!!! se fue cuando precisamente yo —como muchos otros— estaba redescubriendo su música. ¡Es tan extraño todo…! Sin conocerlo en persona, te sientes en sintonía con un maestro que ya está haciendo las maletas. Y lo que queda en ti es un vacío que nunca fue llenado, como cuando te rechazó por WhatsApp aquella chica a la que esperabas besar en una cita próxima.

jueves, 14 de abril de 2016

Manolo Tena, un rockeiro sensorial

Como poeta, débolles moito ós cantautores que escoitei na infancia. Foron a miña primeira escola na arte de inxectarlles ritmo ás verbas. Con aqueles referentes, comecei a escribir cancionciñas ós 10 anos. Tiña unhas nocións de piano, pro case sempre utilizaba a voz pra compoñer as melodías. Xa na adolescencia, as letras de Sabina conducíronme á lírica de César Vallejo e Neruda; tras esas revelacións, foron xurdindo os meus primeiros balbucidos poemáticos. No último ámbito sentinme máis a gusto.

Manolo Tena, na praza de touros de Las Ventas (Madrid), o 7 de setembro de 1993. 


Recentemente morreu Manolo Tena, un dos cantautores rockeiros da miña nenez. Cando coñecín a nova, véuseme á memoria o intre no que un curmán me deixou —alá polo 99— a casete de Sangre española, o maior éxito do estremeño. Tena era un letrista de métrica axustadísima e un intérprete especial. A súa resgada voz revelaba igual cós seus oxímoros a un home en desaxuste coa realidade.



No documental Manolo Tena: Un extraño en el paraíso, o protagonista desvelou que a belísima peza Quiero beber y no olvidar (letra súa con melodía de Pancho Varona) contén un eco vallejiano. O poeta peruano dicía: “Quiero escribir, pero me sale espuma”, e Tena cantaba: “Quiero ser mar; sólo consigo espuma. / Quiero avanzar; sólo consigo espuma”. Este exemplo demostra a relación carnal que o rockeiro tiña coas palabras. Dende logo, era asombrosa a potencia da súa expresión sensorial.



Entre febreiro e marzo, gocei seguindo as interpretacións de Tena en “A mi manera”, programa de La Sexta. Cando acabou a tempada, decidín que esta mesma primavera lle propoñería ó músico unha entrevista periodística. Quizabes houbéramos dedicado parte da conversa ó binomio poema-canción... 


O fundador de Cucharada e Alarma!!! foise agora que precisamente eu como moitos outros estaba redescubrindo a súa música. É tan estraño todo…! Sen coñecelo en persoa, sínteste en sintonía cun mestre que xa está facendo as maletas. E o que queda en ti é un baleiro que nunca foi enchido, como cando te rexeitou por WhatsApp aquela rapaza á que esperabas bicar nunha cita próxima. 

[Artigo meu publicado hoxe no xornal lucense El Progreso (edición da Mariña)]

jueves, 7 de abril de 2016

En la muerte de Chus Lampreave

Chus Lampreave era una actriz tremendamente magnética, ideal para darles a las réplicas una sonoridad y una gracia inigualables. Cualquier locución ordinaria adquiría en su voz otra dimensión, como si esas palabras acabasen de crearse. Además, aun teniendo su dicción un sabor tan castizo, Lampreave entroncaba con la mejor tradición de cómicos estadounidenses (el Hollywood clásico), ya que hacía reír y sonreír sin recurrir a manierismos gestuales o corporales. Sus colaboraciones con Almodóvar son antológicas. 

La actriz Chus Lampreave, fallecida esta semana.

viernes, 1 de abril de 2016

Consigna

Anoche, en un sueño, dije a una mujer querida aquella consigna de Paul Éluard: “NO TE FALTA LA NOCHE, SINO SU PODER”.
(De un apunte de 2010).