Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo

Bitácora de Héctor Acebo, poeta, periodista cultural y doctor en Periodismo.
-Correo: acebobello@gmail.com
-Instagram: @hectoracebo
-Twitter: @HectorAcebo

miércoles, 28 de septiembre de 2011

"El Progreso" publica un reportaje con motivo de la presentación de mi ópera prima, "Camas de hierba", en Lugo

Tal y como he anunciado en la anterior entrada, el diario El Progreso (en donde uno ejerció el periodismo) publica hoy, con motivo de la presentación de mi libro en Lugo, un reportaje. Lo reproduzco a continuación:

HÉCTOR ACEBO SUEÑA CON HERMOSAS MUCHACHAS EN ‘CAMAS DE HIERBA’

El escritor y periodista asturiano presentó en Sargadelos de Lugo su primer poemario



Por María L. Viñas (El Progreso, 28/09/2011)

Arropado por uno de sus maestros y referentes, el escritor lucense Claudio Rodríguez Fer, y por uno de sus colegas plumillas, el periodista de El Progreso -donde realizó sus prácticas- Javier Rivera, Héctor Acebo (San Tirso de Abres, 1987) presentó ayer en la galería de Sargadelos de Lugo su primera incursión en la literatura, el poemario erótico ‘Camas de hierba’. «Sí, se puede calificar así si tenemos que etiquetar. Está en la línea de ‘Tigres de ternura’, de Fer; hay una carnalidad explícita y sugiero más que muestro», comenta el joven poeta.

Ya de muy niño se recuerda a sí mismo componiendo canciones o escuchando a autores como Aute y Sabina. Obviamente, como él afirma riéndose, no contaba con esa «voluptuosidad sexual» que rezuma ‘Camas de hierba’, pero ya apuntaba maneras escribiendo misivas a bonitas chicas, que no siempre enviaba y guardaba como un tesoro secreto.

Acebo dice huir no de la realidad -no puede, es periodista- pero sí de la llamada ‘poesía de la experiencia’, a pesar de utilizar un lenguaje llano. Por ejemplo, follar, esa palabra: «Utilizo términos malsonantes para profundizar en la psicología de los personajes de los que hablo».

Y así también se escapa del terrorismo cotidiano, «viajando a través de la poesía, de los viajes físicos o del cine y la literatura, que son dos viajes hacia la belleza, hacia la luz», abunda.

Transita de esta forma para lidiar con lo rutinario, con lo feo, con lo vulgar, con la ignorancia. Huye de los discursos políticos que, a su juicio, caminan paralelos a los de futbolistas, tenistas y deportistas, en general. «Frases tan tópicas, tan manidas», dice. «Intento buscar el lenguaje en la tradición literaria de España y Latinoamérica». En este sentido, opina que falta lirismo en la profesión periodística, aquel que cultivaron grandes como Álvaro Cunqueiro o Vázquez Montalbán.

Hay algo de escatológico en el amor que propone Acebo en sus ‘camas’: «Sólo a ti te permito que orines en la ducha». Se ríe cuando recito. «Sí, hay unas gotas escatológicas, que tienen que ver con momentos de intimidad, pero que también son una forma de rebelarse contra los modelos publicitarios de los ‘mass media’».

Acebo no duerme en ‘Camas de hierba’; sueña con muslos níveos en los que reposar y hundir su cabeza, como se apoya uno en los prados del Eo -escenario de la obra-. Lugares frescos en los que puede comenzar un viaje luminoso hacia algo tan «revelador» como el sexo. O el amor.


Reproduzco también uno de los poemas que leí ayer en Lugo:

NOVIA DE NADIE

¡Pero cómo voy a perder
yo el tiempo escribiendo
para camelarte!
Mi intención única
es que, al verte pasar,
algunos de tus profesores
exclamen
(a medio camino
entre la excitación
y la pavura):
¡Ahí va Alba,
la novia de nadie!

No hay comentarios: